Enviado por
Pedro:
Había una vez
una hermosa princesa que vivía en un palacio rodeado de un jardín repleto de
rosas y orquídeas. Pero eso es otra historia. Esta trata de pedos. Pero no de
esos pedetes que sueltas sin que nadie se dé cuenta. No, aquí estamos hablando
de pedos como cañonazos, de pedos que revientan los pantalones y lanzan a los
niños por los aires.
Esta es la
historia de Tapón, un niño diminuto, pelirrojo de un rojo chillón, que se ha mudado
a la calle de los Cañones. Allí viven también unos malvados gemelos, Truls y
Trym, los matones oficiales del colegio; Lise, que pronto se hará su amiga, y
el doctor Proctor, que se define a sí mismo como un científico casi chiflado y
cree que sus inventos son poco prácticos.
Su última
creación son unos polvos que sólo sirven para tirarse pedos. A Tapón se le
ocurre modificar la formula para vender petardos a los niños. Lo malo es que se
equivocan, y el resultado se lo querrán vender a la Nasa, hasta que se enteran
los padres de los gemelos…
Si a esto
añadimos una rata de agua de Mongolia, un flan de metro y medio, una anaconda
hambrienta suelta en la red de alcantarillado, y una historia de amor
imposible, la diversión está asegurada al unir los elementos escatalógicos con
las situaciones disparatadas y el humor.
Esta historia
de Jo
Nesbø, el famoso autor novela de novela negra, comienza el año 2007, cuando su hija le pidió que le
explicara un cuento mientras cenaban, y la serie tiene ya varios volúmenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario