Solamente he estado en
una de las sesiones y me ha encantado ver como se ha hecho con los chiquillos,
como ellos han disfrutado. Ese tono tan gallego, esa forma de hablar tan cantarina
cautivan. Con un tablero de la oca y unas sencillas preguntas ha hecho
reflexionar a los alumnos sobre el Quijote. A partir de ahí, el significado de colores, de qué color te pintarías, de qué color es tu profesor, de qué color es un beso... Ver como Ángel contaba el cuento de Caperucita, con tus indicaciones, haciendo esos movimientos, o saltando, o cambiando los registros de voz, ha sido una delicia.
Gracias, Pepa, te prometo que un año de estos haré la Ruta de los Cuentos de los Hermanos Grimm
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