Enviado por María:
Matilda, de cuatro años, es una lectora precoz que vive en una familia donde el padre es un sinvergüenza y la madre una desocupada consumidora de televisión y jugadora de bingo. Nunca se preocupan por ella y la obligan a mirar la televisión negándose a comprarle libros además de dejarla sola todas las tardes. Matilda, mientras están fuera comenzará a acudir a la biblioteca donde encontrará el fascinante mundo de la literatura.
Matilda, de cuatro años, es una lectora precoz que vive en una familia donde el padre es un sinvergüenza y la madre una desocupada consumidora de televisión y jugadora de bingo. Nunca se preocupan por ella y la obligan a mirar la televisión negándose a comprarle libros además de dejarla sola todas las tardes. Matilda, mientras están fuera comenzará a acudir a la biblioteca donde encontrará el fascinante mundo de la literatura.
La escuela será para ella un lugar donde encuentre lo bueno y lo malo
del mundo adulto y su poder: una pésima y cruel directora, Agatha Trunchbull,
que asusta a los niños sobre los que ejerce una tremenda violencia y una
delicada profesora, la señorita Honey, que sabrá darle a Matilda el amor que
necesita para crecer.
Roald Dahl desarrolla la trama
de manera muy rápida, atrapándonos la rapidez con la que se desarrollan los
hechos. Trata diversos temas: familias poco convencionales, problemas
escolares, la amistad… Las
ilustraciones de Quentin Blake describen
muy bien la situación que se está leyendo. A veces, el narrador se introduce en
la historia para dar su opinión, de una forma divertida y cínica. No hay muchos
personajes, cada uno tiene una función concreta y necesaria para el desarrollo
del resto de la historia. Es un libro fresco, divertido, de fácil lectura.
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