IN MEMORIAM DE STEPHEN HAWKING
(8 DE ENERO DE 1942, 14 DE MARZO DE
2018)
Si el universo
fuese verdaderamente infinito espacialmente, o si hubiese infinitos universos,
habría probablemente en alguna parte algunas grandes regiones que habrían
comenzado de una manera suave y uniforme. Es algo parecido al bien conocido
ejemplo de la horda de monos martilleando sobre máquinas de escribir; la mayor
parte de lo que escriben será desperdicio, pero muy ocasionalmente, por puro
azar, imprimirán uno de los sonetos de Shakespeare. De forma análoga, en el
caso del universo, ¿podría ocurrir que nosotros estuviésemos viviendo en una
región que simplemente, por casualidad, es suave y uniforme? A primera vista
esto podría parecer muy improbable, porque tales regiones suaves serían
superadas en gran número por las regiones caóticas e irregulares. Sin embargo,
supongamos que sólo en las regiones lisas se hubiesen formado galaxias y
estrellas, y hubiese las condiciones apropiadas para el desarrollo de
complicados organismos auto reproductores, como nosotros mismos, que fuesen
capaces de hacerse la pregunta: ¿por qué el universo es tan liso? Esto
constituye un ejemplo de aplicación de lo que se conoce como el principio
antrópico, que puede parafrasearse en la forma «vemos el universo en la forma
que es porque nosotros existimos»
Stephen
H. Hawking, Historia del Tiempo
No hay comentarios:
Publicar un comentario