Enviado por Miguel.
Nuevas aventuras en la disparatada ciudad de Ankh-Morpork,
coincidiendo con los preparativos de la celebración de la noche más importante
del año. Es la Vigilia de los Puercos, la fiesta invernal que marca el año
nuevo en el Mundodisco. Los niños duermen y esperan que Papá Puerco baje por la
chimenea y les deje sus regalos. Sin embargo, algo extraño está ocurriendo. El
visitante no es un anciano tripudo de barba blanca. Recuerda más bien a un
esqueleto. No se aclara mucho con el almohadón que lleva atado a la cintura
debajo del traje rojo. Exclama «¡Jo, jo, jo jo!» en tono fúnebre y parece más
acostumbrado a usar la guadaña que a repartir caramelos dentro de los calcetines.
Pero alguien tiene que hacer el trabajo, porque Papá Puerco está… bueno, a
falta de palabra mejor, muerto. Y si para mañana por la mañana no creen en él
las suficientes personas, el sol no asomará por el borde del mundo. En esta
nueva novela el destino del Mundodisco queda en manos del auténtico sentido de
la fiesta más entrañable del calendario, que es poner regalos bajo el árbol y
comer hasta reventar.

Como ocurre en todos los libros de Terry Pratchett, "Papá
Puerco" contiene algunas reflexiones memorables... y mucho mucho humor. El
final también merece ser destacado. Pratchett vuelve a insistir con la idea que
hay cosas que existen de verdad sólo porque creemos en ellas. En este libro se
hace una inteligente sátira de los personajes ficticios que ha creado la
humanidad para su propio beneficio como pueden ser Papá Noel, el Hada de los
dientes o la propia Muerte.
Este libro tiene su versión como miniserie televisiva; existe una versión en castellano, aunque los vídeos que veis aquí están subtitulados:
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